Encender
velas, elegir los colores adecuados como los sitios de la casa acordes para que
armonice, protejan, den buenas energías y equilibren el ambiente a través de la
llamada velomancia, es muy purificador como sanador.
Las
velas amarillas están destinadas para los
rituales que se hacen con el fin de atraer dinero y empleo como también para
tener más suerte.
Las
de color rojo son las que usan los
enamorados, puesto que representan al amor y al atractivo sexual pero son más
utilizadas en ritos de magia cuando se hacen amarres o destrabes, y así atare
al ser amado.
Las
velas blancas, las más puras sirven para
poder ubicar en los ambientes de la casa y así purificarlos completamente.
Además absorbe la buena vibra y si hay enfermos los purifica.
Aquellas
que son doradas, es todo un tono místico
que hace que la energía se trasforme, se renueve y uno se eleve
espiritualmente. Es por ello que es un color que usan aquellos que meditan,
hacen mantas y visualizaciones.
Las
que son de color verde, representan a la
naturaleza y se utilizarse para atraer el dinero, traen aires renovados y
puros, esperanza y en el mundo esotérico, el verde es sinónimo de salud tanto
física como psicológica y espiritual. Este color ayuda mucho a la sanación. Si
le las enciende en la casa, otorga mayor bienestar y refresca cada rincón de la
misma.
Las naranjas se encuentran asociadas lo creativo,
es muy energético. Debido a su gran potencia, la usan mujeres que no pueden
tener hijos o sufren alguna dificultad en el embarazo. Mejoran el estado
anímico y ayudan a bajar las tensiones cuando estamos atravesando situaciones
adversas que repercuten en el hogar.
Las
velas de color marrón se usan para abrir
caminos, para darle una solución a todo tipo de problemas laborales y
económicos.
Las moradas representan lo divino, para alcanzar
una renovación de energías y que lo espiritual se eleve y fluya en todo los
ambientes de la casa.
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